Las expediciones de Zheng He representan una de las mayores demostraciones de fuerza naval de la China medieval y un esfuerzo por proyectar influencia más allá de sus fronteras.
Los increíbles viajes del almirante Zheng He
Los barcos del tesoro y la magnitud de las expediciones
Las flotas comandadas por Zheng He eran asombrosamente grandes, con barcos que, según algunos relatos, alcanzaban longitudes de más de 120 metros. Estas embarcaciones, conocidas como “barcos del tesoro”, transportaban a miles de marineros, soldados, mercaderes e intelectuales. Además de los barcos principales, la flota estaba compuesta por embarcaciones auxiliares encargadas de transportar caballos, provisiones y armamento, lo que permitía a la expedición mantenerse autosuficiente durante largos periodos en alta mar.
La escala de estas expediciones no tenía parangón en el mundo de la época. La logística para mantener una flota de tal magnitud era formidable, implicando la recolección de enormes cantidades de recursos, como arroz, agua potable y madera, así como la planificación detallada de rutas y escalas en puertos aliados para reabastecerse y comerciar.
La tecnología naval china estaba muy avanzada, con la incorporación de timones de viga, compartimentos estancos y sistemas de navegación que permitían travesías prolongadas. Se empleaban cartas de navegación detalladas y astrolabios, y la flota contaba con especialistas en meteorología y astronomía que ayudaban a guiar las embarcaciones por rutas seguras. Las flotas no solo eran un medio para expandir la influencia comercial de China, sino también una declaración de poder a otros imperios y reinos, que veían en las imponentes embarcaciones una demostración de la superioridad técnica y militar de la dinastía Ming.
Destinos y alianzas
Zheng He y sus flotas visitaron numerosos puertos del sudeste asiático, como Malaca y Sumatra, donde se forjaron lazos comerciales y se establecieron relaciones políticas que facilitaron el paso seguro de las embarcaciones chinas. Las expediciones prosiguieron hacia el subcontinente indio, haciendo escala en puertos importantes como Cochin y Calicut, centros clave del comercio de especias.
Al llegar a la península arábiga, Zheng He entabló alianzas con los sultanatos locales y visitó ciudades de gran relevancia estratégica como Ormuz, cuya ubicación permitía el control de rutas comerciales vitales entre Asia y el mundo islámico.