Lucio Sergio
Catilina nació en Roma en el año 109 a. de C., dentro de una familia patricia venida a menos. Seguramente, debido a ello, tuvo siempre una ambición desmedida y una pasión por llegar a la cumbre del Estado, para lo que nunca le importó utilizar cualquier método a fin de ascender como fuera y lo más rápidamente posible.
Empezó su carrera luchando en las guerras civiles, primeramente, bajo el mando de Pompeyo Estrabón, en el 89 a. de C., y luego de Sila, hasta el 81 a. de C. Colaboró fervientemente con este último en sus famosas y sangrientas proscripciones y no le importó matar, entre otros, a su propio cuñado, Marco Mario. Al principio, su carrera fue muy bien. Cuestor en el 77 a. de C., pretor en el 68 y prefecto de África en el 67 y 66.
A pesar de que ya había tenido anteriormente algún roce con la Justicia, sus problemas empezaron cuando ya se disponía a ser cónsul, la más alta magistratura romana, y tenía muchas posibilidades de ser elegido para ese cargo.
Discurso de Cicerón contra Catilina
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Ludovica
02/05/2015 @ 19:40
Buen artículo, Juan. Espero que publiques más cosas como esta. Catilina es uno de esos grandes personajes de la Historia que se desconocen, y artículos como el tuyo hacen que los conozcamos.
Marco Tulio Cicerón: la voz de la República Romana - Revista de Historia
18/01/2024 @ 10:36
[…] la conspiración de Catilina, una serie de intentos de golpe de estado. Sus discursos contra Catilina, conocidos como las “Catilinarias”, son considerados obras maestras de la retórica y […]