Diocles, el deportista mejor pagado de la Historia

Comenzamos destacando la parte de la vida que conocemos del más aclamado y glorioso Cayo o Gallo Apuleyo Diocles. (Gaius Appuleius Diocles es su nombre en latín), nacido en el año 104 d.C. en la provincia de Lusitania, en la Hispania romana, siendo el emperador de Roma Trajano, después durante el imperio de Adriano, y llegó a emérito o jubilado  siendo el emperador Antonino Pio en el año 146 d. C. se retiró a  Preneste (en la actual Palestrina a 9 leguas romanas (a unos 40 Km) de Roma, la gran urbe y capital del vasto imperio romano.

Diocles fue el deportista y auriga (o corredor de los carros de carreras en los estadios o en los circos romanos), más aclamado y famoso del Mundo Antiguo. Y según un estudio de investigación de reciente publicación, como veremos más adelante, al parecer, Diocles ha sido el deportista mejor pagado en la historia de todos los tiempos.

Diocles, el mejor pagado de la Historia

Su carrera como auriga de 24 años fue bastante larga, ya que muchos aurigas morían jóvenes o quedaban impedidos por accidentes en las carreras. Comenzó a correr a los 18 años por la facción o equipo blanco, cambiando al verde a los 24 y finalmente al rojo a los 27, donde siguió corriendo hasta retirarse a los 42 años. Compitió en total, 4257 carreras y obtuvo 1462 victorias, quedando en segundo o tercero puesto en otras 1438 carreras. El porcentaje de triunfos es superior al 34 %. Se estima que ganó la interesante e impresionante suma de 35.863.120 sestercios antes de retirarse, como emérito o licenciado a los 42 años de edad, instalándose con su familia en aquella bella ciudad romana de Preneste, donde falleció millonario años después.

La vida y carrera del lusitano Diocles nos es a día de hoy conocida por dos documentos epigráficos. El primero es una lápida procedente de Roma, ciudad de sus impresionantes triunfos, que resumía toda su trayectoria profesional y sus logros jamás igualados. Debieron levantarla sus admiradores en el llamado Circo de Nerón, en la actual Ciudad del Vaticano, donde Diocles debió de correr miles de veces y donde han aparecido varios monumentos más de la misma índole. El de Diocles es el testimonio epigráfico más importante de aquellos que han aparecido  sobre las carreras de carros de la época. Y aunque aquel original se haya perdido, se han salvado copias del texto inscrito en el mismo.

Según consta en los registros de las Actas del Circo: Su vida profesional como conductor o piloto de carros de carreras en Roma se prolongó durante 24 años, desde el año 122 d.C. hasta el año 146 d.C. en que se retiró como emérito, considerado por todos como héroe, ídolo, semidiós, gran triunfador y multimillonario. En total, obtuvo una ganancia de 35.863.120 sestercios, más aún que ningún otro deportista hasta la época.

En los tiempos de Antonino Pío, que gobernó el Imperio romano (138 a 161 d.C.) según inscripción perteneciente al año 146 d.C. y siendo Diocles en ese momento corredor de carros de carreras de los circos romanos, líder del equipo rojo, en ese año 146 de nuestra era, se licenció (pasó a ser emérito o jubilado) cuando tenía 42 años, 7 meses y 23 días.

El segundo texto epigráfico, procede del templo de la diosa romana Fortuna Primigenia de Praeneste (en la actual Palestrina), donde decidió retirarse hasta el fin de sus días. De su muerte no se sabe nada. Se piensa que murió en Praeneste, rico y con buena posición social. Dejó dos hijos, un hijo y una hija, llamados Cayo Apuleyo Nimfidiano y Nimfidia, que dedicaron a su padre una desaparecida estatua de la cual era basa la estela de la inscripción.

A día de hoy, aseguramos que Gaio, fue el deportista mejor pagado de la historia, en base a los resultados obtenidos en el último estudio de Peter T. Struck, que es  un investigador de la universidad de Pensilvania, en el cual, ha calculado la fortuna conseguida por Diocles, en más de 15.000 millones de dólares actuales, (unos 13.500 millones de euros). Cifra que lo convierte en el deportista mejor pagado de todos los tiempos.

Superando a las riquezas o las fortunas conseguidas por los deportistas famosos contemporáneos, mejor pagados, según la prestigiosa revista Forbes, como son en los primeros puestos, a Cristiano Ronaldo con 93 millones de dólares, seguido por otros deportistas tales como a LeBron James, a Leo Messi, a Roger Federer, a Kevin Durant, Andrew Luck, a Rory McIlroy, a Stephen Curry, James Harden o Lewis Hamilton por nombrar sólo a los diez primeros de la lista.

Y según las indagaciones de Struck, toda esa gran cantidad hubiera servido para mantener a todo el ejército romano y a sus legiones durante un periodo de tres meses, como nos explica el investigador, para hacernos una idea del alcance de todos sus emolumentos como corredor. Partiendo de las cifras acumuladas que según consta en su gran epígrafe suman 35.863.120 sestercios en su vida laboral, una gran cifra que recoge la inscripción monumental que al pasar a ser emérito (su jubilación) le dedicaron en Roma en el año 146 d.C., sus admiradores y sus compañeros de profesión. Además de la cifra inscrita de 35.863.120 sestercios.

Se le considera el “recordman” de los aurigas, el “AS” de aquellas carreras circenses o carreras de carros con sus inigualables logros.

Es preciso destacar cómo alrededor de este auriga, se forjó toda una aureola gracias a la cual, todos sus ingresos económicos se multiplicaron, debido a la capacidad, de movilización de sus fans y aquellos seguidores que le generaban importantes ingresos adicionales, a los premios de las carreras, como en las apuestas y todo el material publicitario de los deportistas, que es sencillamente reconocible en las grandes estrellas más y más cotizadas del deporte a día de hoy, que sin embargo, no van a poder llegar de ninguna manera, a aquellos niveles acreditados, por el singular protagonista y gran héroe Diocles.

Autor: Diego Molina Ruiz para revistadehistoria.es

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